Gordon y Norma Sheets se comprometieron y se casaron el mismo día que Norma se graduó de secundaria el 26 de Mayo de 1936.
La pareja vivió una vida plena siempre acostumbrados a trabajar como un equipo. Compartieron los mismos negocios, viajaban juntos. Cuando se retiraron, asistían juntos al club de cartas. Lo hacían todo juntos, jamás estuvieron separados.
Tuvieron dos hijos, 14 nietos, 29 bisnietos y un tataranieto.
Gordon, un hombre muy simpático y extrovertido aun reparaba el techo de su casa a la edad de 94 años. Él era el más extrovertido de los dos, Norma, 4 años menor que él, lo apoyaba en todo.
Hace unas pocas semanas dejaron su pequeño pueblo en el estado de Iowa en EUA para ir a la ciudad pero no pudieron llegar. Un fuerte accidente de tránsito los envió a ambos a la unidad de cuidados intensivos del hospital con huesos rotos y varias lesiones.
Sus hijos Donna y Dennis se turnaban entre una habitación y la otra para acompañar a sus padres ambos en condiciones de salud muy delicada. Aunque Norma se quejaba del dolor en su pecho lo que más le preocupaba era el estado de Gordon por quien no dejaba de preguntar.
De la misma forma, Gordon con varias lesiones dolorosas en la espalda no dejaba de preguntar por Norma.
Cuando se hizo evidente que la situación de ambos no mejoraba la pareja fue acomodada en una habitación del hospital donde podían estar juntos, una cama al lado de la otra de tal manera que podían tomarse de las manos. Gordon con su mano derecha y Norma con su mano izquierda, la inseparable pareja en su convalecencia permanecían unidos.
Pocos dias después de reunirse en la misma habitación Gordon dejo de respirar y falleció a las 3:38pm. Para enorme sorpresa de la familia, el monitor al que estaba conectado continuaba marcando latidos de corazón. La enfermera les explico, que los latidos de Norma pasaban a través de la mano de Gordon y así llegaban al monitor. Sus hijos se emocionaron al presenciar como el corazón de su padre latía a través del de su madre.
Norma murió exactamente una hora después de Gordon.
Su hija Donna ha dicho que la manera como murieron sus padres fue reflejo de su matrimonio y su vida juntos. Según Dennis, Gordon solía decir que siempre valía la pena esperar por una mujer. Es como si Gordon espero durante una hora y estuvo allí para abrirle la puerta.
Durante el funeral la pareja fue puesta en una misma urna, tomados de la mano. Luego fueron cremados y sus cenizas unidas antes de ser enterradas.
Norma y Gordon son prueba de que el verdadero amor existe y es para toda la vida.