lunes, 14 de febrero de 2011

Replica a Jordy Enrique Moncada Cartaya


Coincido con Jordy Moncada sobre el interés que debe existir por debatir y buscar soluciones a realidades sociales que son motivo de preocupación nacional.   
En su artículo del 15 de Octubre de 2010 en el diario El Universal de Venezuela se pronuncia a favor de la despenalización del aborto en los primeros 3 meses de gestación basado principalmente en el respeto al derecho a la intimidad de la mujer.
Sin embargo hay dos aspectos no religiosos que no toma en cuenta el articulista al defender dicha postura.
En primer lugar, tal y como lo demuestran las estadísticas de organizaciones internacionales con años de experiencia en asesoría psicológica a quienes están considerando el aborto como una opción, el aborto es una reacción de pánico ante una situación inesperada y sorpresiva que luce a primera vista como desastrosa. Las estadísticas demuestran que una vez que la mujer entra en contacto consigo misma de una manera calmada y sin ser presionada por agentes externos, logra descubrir lo que ella realmente desea. El pánico generalmente nos lleva a tomar acciones que no son las correctas. Una situación que luce terrible en un momento puede verse muy distinta algunas semanas después de la impresión inicial.
 En segundo lugar la embriología moderna y la genética han probado contundentemente que la vida humana empieza una vez que se ha producido la fertilización, con lo cual el aborto acaba con un ser humano real que tiene vida. Esta realidad trae consigo una responsabilidad que deben asumir los profesionales de la medicina, quienes han sido entrenados para sanar y salvar vidas, no para destruirla. Durante el aborto, el embarazo es deliberadamente interrumpido acabando con la vida de un niño que no ha nacido pero que ya existe.
 El mismo día en que el espermatozoide del padre y el ovulo de la  madre se juntan en la trompa de Falopio, ya una nueva vida ha comenzado. Esta ya determinado el sexo del bebe, la altura que alcanzara en su edad adulta y el color de su cabello y de sus ojos.
Cada vez que un embarazo es deliberadamente terminado, una adolescente o una mujer es abusada y una vida humana es liquidada.
El aborto puede causar graves daños a la madre y al niño. Mujeres que han sido sometidas a abortos se encuentran sin el problema del embarazo, pero con muchos otros nuevos problemas con los cuales lidiar tales como serias depresiones, sentimiento de culpa, rabia y pérdida de autoestima. Frecuentemente las relaciones de pareja terminan después de un aborto. Hay muchos hombres que también sufren cuando se dan cuenta de que no pueden proteger a su bebe aun no nacido.
El triste hecho de que se practique el aborto de manera ilegal en Venezuela, no es razón para permitirse su práctica bajo el cobijo de la ley. La solución a este problema viene dada como tanto otros problemas en el país, por una política de educación y protección a la vida y a la dignidad humana.